Muchas veces recibo correos de quienes me preguntan, de que tratan los talleres, si es una especie de terapia en grupo, y el porqué de las repeticiones. Hoy tratare de responder a esas interrogantes.
El Jueves 12 de Enero de 2012 comencé a compartir los talleres de Ho´oponopono.
Elegí iniciarlos un día jueves porque en la creencia tradicional hindú, con la que me encuentro completamente identificada, el día Jueves, es el día de Gurú o Maestro espiritual y es auspicioso para dar y recibir enseñanza.
Dado que desde un principio estuve consciente que los talleres los compartiría, ya que la enseñanza era para todos y yo también la estaba recibiendo.
Y nos es que yo sepa más, es simplemente que yo comencé un poco antes, y en ho´oponopono la practica te va enseñando.
Han pasado más de 27 meses, en los que cada jueves hemos armado un grupo diferente, y si bien la base de cada taller es la misma, lo que recibimos en cada uno de ellos, siempre trae algo nuevo.
En los grupos, la mitad de los asistentes son personas que repiten una y otra vez la experiencia, y la otra mitad son quienes vienen por primera vez.
Con alegría nos embarcamos en esta nueva forma de aceptar la vida y vamos ascendiendo hacia la cumbre de un estado saludable de paz.
No hay mejor sanación que la alegría. Dejar atrás la rabia, el resentimiento y el miedo.
Un viejo refrán hawaiano dice:
”Si Usted está enojado por más de tres días: la enfermedad vendrá”
En los talleres, no tocamos ningún tema personal, no nos contamos desgracias ni sufrimientos, y agradecemos que así sea, sin embargo en cada taller cada uno de nosotros recibe la claridad necesaria para comenzar un método diferente en la solución de nuestros problemas y ese método consiste en la entrega.
¿De que se trata esta entrega?
La entrega consiste en dejar de tratar de controlarlo todo, soltarlo en las manos de un Poder Superior, aceptar y confiar, sin detener la acción.
¿Es necesario algún tipo de preparación?
No, lo que hacemos en los talleres regulares, es reordenar cosas que ya sabemos, sea cual sea nuestra preparación y en los talleres especiales, aprendemos a contactarnos y trabajar con nuestro Unihipili o Niño Interior que es el responsable de guardar todas las memorias que hacen que nuestra realidad sea, la que es.
Retomamos la relación mas importante en nuestra vida, ¡la relación con nosotros mismos!.
Si bien es cierto el Ho´oponopono es una practica hawaiana, eso no quiere decir que no coincida con el pensamiento de todas las demás culturas.
Existe una organización oficial llamada IZLL, que se encarga de hacer seminarios por el mundo entero, sujetos a determinada reglamentación.
En mi caso, al no pertenecer a la organización oficial , me tomo la libertad de fundamentar y combinar la practica, con técnicas afines y variadas, las mismas, que he practicado y experimentado a lo largo de mi vida y que encuentran, en el ho´oponopono, una coherente expresión.
En el ho´oponopono hay siete principios de sustento.
“El mundo es lo que tu piensas que es”; todo vive en ti y eres tú, quien elige como quieres que sea, según las memorias que actives
“No existen limites, la separación es una ilusión”, nada te es ajeno, tu, yo y todo lo existente estamos unidos por el hilo invisible de la existencia,
“Hay un solo momento y es ahora” , en este momento que lees esto, es el presente y no hay otro momento, el pasado se fue y el futuro cuando llegue: ¡será presente!.
Otro principio básico es “Allí donde va mi atención, va mi energía”, entonces poco a poco vamos entrenándonos en ver lo bueno, oír lo bueno y hacer lo bueno, para que todo aquello que no lo es, entre en desuso y desaparezca.
El siguiente es totalmente lógico: “Amor es estar feliz”, cuando el amor ocupa su espacio, ¿que sentimiento podrá arrebatarnos la paz?
Otro principio que nos reafirma es: “Todo poder viene de tu interior”, nada es afuera, todo sucede dentro de nosotros, la realidad la experimentamos dentro.
Y la flexibilidad del Ho´oponopono se nos da en este principio: “La eficacia es la medida de la verdad”, si lo que estas haciendo, te da paz verdadera: ¡Eso es verdad para ti!.
Estos siete principios se hacen parte de nuestra vida y todo empieza a tener una nueva luz, después de cada taller hay una comprensión mas amplia, ya no ponemos resistencia y llega la aceptación necesaria para la entrega y soltar el control, finalmente hemos entendido que:
“A lo que me resisto persiste, lo que acepto se transmuta”,
Y así, seguiremos compartiendo esta experiencia y alimentándonos de ella para tener siempre, paz más allá de todo entendimiento.
Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como solo Uno. Te entrego todas mis memorias de dolor para que tu las transmutes en luz.
Y que esa misma luz, ilumine el camino de mi vida.
¡Y así se ha hecho!
Lo siento, por favor perdóname
Te amo, Gracias
Ana María
Aloha Ke Akua
“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”