Cuando hablamos de Ho´oponopono, hablamos de borrar memorias ancestrales, yo te puedo decir que hay otro tipo de memorias que no son ancestrales y que se han instalado en nuestro cuerpo desde el nacimiento.

Cada vez que no expresamos una emoción debidamente, la energía generada por esa emoción, regresa al cuerpo convirtiéndose en una contractura, inicialmente, para luego ir modificándose, va  desde cambiar la postura de la persona, hasta manifestarse como una enfermedad.

Cada parte del cuerpo retiene emociones especificas. Pero sólo retiene aquellas emociones,  que no fueron expresadas debidamente en su momento.

Si tengo miedo y no lo reconozco ni lo expreso, esa energía de  miedo, vuelve para ubicarse en el órgano que retiene el miedo y eso es:  en los riñones.

En este articulo tratare de explicar algunas correspondencias, es un tema muy extenso y complicado pero explicaré lo mas relevante.

Comencemos con los pies, ellos nos sostienen y pisan nuestra realidad, cuando la realidad es angustiosa, los pies tratan de separarse del suelo, entonces los dedos se encorvan y los arcos se levantan, y lucha por separarse de la realidad, o simplemente se abandonan y desaparece el arco.

Las pantorrillas guardan la energía de las decisiones o los pasos en la vida, cuando hay dudas o  vacilaciones,  se contracturan.

 Los muslos guardan tanto la rabia como la tristeza, dependiendo como enfoque la vida cada persona, muslos flácidos son comunes en personas depresivas, muslos muy duros en personas cuyo motor es la rabia, lo ideal es un equilibrio entre los dos tipos.

La zona abdominal es la mas sensible, esta guarda las vísceras, decir “es algo visceral”, quiere decir que es una reacción primitiva, la diferencia entre los seres humanos y los animales esta en que hasta las vísceras somos muy parecidos, a partir del pecho que guarda las emociones, la garganta,  la palabra y la cabeza el razonamiento, y la capacidad de trascender,  hacemos la diferencia con las bestias.

Cada vez que algo nos provoca rabia, el cerebro segrega la adrenalina que nos impulsa a dar un golpe, pero como no andamos por la vida golpeando a los demás, esa energía queda retenida en los puños, los brazos, y antebrazos y sube hasta los hombros y las mandíbulas, conectándose después con toda la espalda y bajando por las caderas.

Un largo recorrido que puede evitarse con el solo hecho de aceptar que las cosas no tienen que salir como queremos, siempre serán diferentes, mejores o peores,  pero diferentes. Ese estado nos mantiene alejados de la rabia y sus consecuencias.

Si somos flexibles en nuestros conceptos, nuestras articulaciones estarán saludables.

En cuanto a los órganos, la rabia se queda en el hígado, las carencias afectivas en los bronquios, la amargura en el páncreas, el desamor en el corazón….

Creo que esta información es suficiente, no tratemos de saberlo todo, de aprenderlo todo, lo que nos ayuda en el avance espiritual, es lo interesante de  aprender, todo lo demás solo va a engrosar la capa de memorias.

Volver a ser como niños, inocentes y humildes nos facilita la entrega.

Es por eso que,  el momento mas hermoso de la vida es cuando comenzamos a desaprender, a soltar el control y dejarnos en la manos de la divinidad

La vida es simple  y el camino más fácil, cuando Lo Divino tiene el control.

Quisiera terminar este articulo con un párrafo que me envió mi maestro y consejero Eduardo Waslli

“He aquí mi pregunta:

¿A medida que la vida pasa, crece en ti la felicidad o el sufrimiento?

No pidas que defina estas palabras.

Responde de acuerdo a lo que sientes…….o piensas…o como te conduces Acepta en cambio mi propuesta:

Sigue el modelo de aquello que  NACE..CRECE….REPRODUCE ,

No de lo que camina hacia…………… la muerte.

Salta por encima de……………………. tu sufrimiento y

Entonces no crecerá el abismo

Sino la vida que hay en TI

   

Yo te diré que un número es distinto a sí mismo

Según tengas que DAR o recibir,

Y que el sol ocupa más lugar en los seres humanos que en los cielos.

 

Que tu corazón afirme: «

¡Me gusta  la realidad que construyo!”

                                                                Mario Luis Rodríguez Cobos – SILO

  

Como siempre deseo para ti y para mi, paz más alla de todo entendimiento.

 Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como solo Uno. Te entrego todas mis memorias de emociones mal expresadas para que Tú, las transmutes en luz.

Libera las memorias que condicionan mi cuerpo y mi salud mental y emocional.

 

¡Y así se ha hecho!

 Lo siento, por favor  perdóname


 Te amo,
 Gracias


 

Ana María

 


Aloha  Ke Akua



“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”