Aquí y Ahora, sólo hay paz

“La incomodidad, la ansiedad, el estrés, la preocupación – todas las

formas de miedo- son causadas por exceso de futuro y poco presente…

La culpa, las lamentaciones, el resentimiento, las quejas, la tristeza, la

amargura – todas las formas de falta de perdón- son causadas por

exceso de pasado y falta de presente.

 

                                             Eckhart Tolle, en “El poder del ahora”

 

La maravilla de practicar el Ho’oponopono es que siempre se hace en el

presente, limpio mis memorias hoy, entrego todo lo que me molesta hoy,

trabajamos con nuestro lado derecho del cerebro, siempre en presente.

 

Es con el lado izquierdo de nuestro cerebro que nos trasladamos al pasado

y al futuro y siempre que lo hacemos dejamos que los pensamientos

irracionales nos atormenten o divagamos en fantasías que nos ausentan.

 

Hay un gran desgaste mental en la divagación, eso no quiere decir que la

experiencia vivida no sea importante. El pasado puede ser utilizado en el

presente como un libro de consulta, nos servirá, para no cometer los

mismos errores, para aprender de ellos y repararlos.

 

En Ho´oponopono no hay resistencia, ni negación, sólo aceptación.

 

Aceptamos que hemos cometido errores sólo para repararlos, no para

revivirlos como estandarte de sufrimiento y culpabilidad.

 

Vivir en el presente es un aprendizaje. Solemos estar más en el pasado o en el futuro sin darnos cuenta que el único tiempo real es el hoy.

 

Si los planes y proyectos se pueden vivir en el presente. ¿Cómo hacerlo?

 

Un proyecto comienza en un punto y termina en la meta.

 

Si nuestra atención está puesta más en la meta, mirando a lo lejos,

podríamos descuidarnos, y no poner atención en cada paso que damos.

 

De esa manera perdemos parte de nuestra vida, sin darnos cuenta que la

felicidad está en la acción y no en el resultado.

 

A todos nos ha pasado que planeamos alguna celebración, y cada detalle

que vamos completando nos llena de gozo, cuando la celebración llega, luego pasa muy rápidamente, y apreciamos que obtuvimos más placer con cada paso que nos acercó a esa meta.

 

Por otro lado cuando ponemos nuestra atención en el futuro nos llenamos de expectativas y ellas obstaculizan. Con nuestras expectativas, restringimos las posibilidades.

 

Nos concentramos en un solo resultado, sin darnos cuenta que se nos

puede dar un sinfín de posibilidades.

 

Cuando hice mi primer taller de Ho´oponopono, Soledad, mi maestra nos

puso este ejemplo:

Un hombre demora tres horas cada día para llegar a su trabajo, decide que

lo que el necesita es un coche para llegar más rápido, comienza entonces a

fijar todas sus expectativas en obtener ese coche, se imagina manejando

cómodamente para llegar a su trabajo, consigue el dinero y compra el

coche, entonces ya no demora tres horas sino dos horas, en cambio si este

mismo hombre hubiera dejado abiertas las posibilidades, tal vez ¡hubiera

conseguido un trabajo muy cerca de su casa!

 

El Universo, Dios, La Existencia, El Absoluto, está lleno de posibilidades,

son tantas y tan variadas e infinitas que nuestro intelecto no podría

conocerlas todas, entonces:

¿por qué limitar esas posibilidades con una sola idea fija?

 

El hoy, el aquí y el ahora sólo nos proporciona paz, cuando vivimos el

presente en cada cosa que hacemos, es como si el tiempo creciera, nos

alcanza para todo y sin estresarnos. Es el mismo Eckhart Tolle que dice

“Estrés es estar aquí, queriendo estar allá”

 

Perder el presente es re-sentir una y otra vez, con dolor y amargura, culpar,

juzgar y criticar.

 

El presente nos impulsa a la gratitud y el perdón.

 

He aprendido a solucionar hoy, lo del día de hoy, sin adelantarme ni

angustiarme y así mi vida discurre mayormente en paz.

 

Claro que de vez en cuando pierdo el paso y felizmente me doy cuenta

rápido y retomo el camino del aquí y el ahora…

 

Que tengamos paz, más allá de todo entendimiento.

 

 Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como solo Uno. Te

entrego mis memorias de miedo y divagación para que Tú, las

transmutes en luz.

 Enséñame a vivir en presente, en el aquí y el ahora.

 ¡Y así se ha hecho!

 Lo siento, por favor perdóname

 Te amo, Gracias

 Ana Maria

 


Aloha  Ke Akua



“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”
 


Aquí Y Ahora

Algo que me ha costado y que  sigo trabajando en ello,  es el estar aquí y ahora, el tiempo presente es el único tiempo real, el pasado se fue, el futuro cuando llegue será presente y lo que vivo aca y ahora es mi realidad.

Estar presente es fundamental y liberador, la mayoría de nuestros miedos son sobre el futuro.

Recuerdo mucho  que siendo  niña, me atormentaba pensado que mi abuela Alejandrina algún día tendría que morir,  y muchas veces lloré de solo pensarlo.

Mi abuela para mi, fue la presencia en mi presente, yo sabia que con solo estirar mi mano encontraría la suya esperándome.

Esa presencia, ese estar presente, fue fundamental en mi vida.

Sin embargo, agradecí a Dios su liberación el día que murió, ella a los 91 años cayó enferma , perdió su lucidez y se deterioro rápidamente. Su cuerpecito fue una pesada escafandra por tres años,  hasta que se liberó y volví a sentirla presente hasta hoy, ella forma parte de mí.

Comparto este relato  contigo para decirte que mi sufrimiento fue,  por algo que nunca llegó como lo esperaba,  fue inútil e irracional.

Tan irracional como puede ser toda vivencia por anticipado,

“La relación más importante y primordial de la vida es la relación con el Ahora, o mejor aún, con cualquiera que sea la forma que adopte el Ahora, es decir, lo que es o lo que sucede. Si la relación con el Ahora es disfuncional, esa disfunción se reflejará en todas las relaciones y en todas las situaciones de la vida”. Eckhart Tolle

Cuando lo que hacemos , lo hacemos estando en el presente, toma un color y una intensidad diferente.

En cambio nuestra tendencia es vivir el presente como un obstaculo a superar para llegar a la meta o  realización de algo o de nosotros mismos en el futuro, pero cuando ese futuro llegue,  seguiremos viéndolo como otro obstáculo a superar para llegar a otra meta.

En conclusión siempre estamos,  pero no estamos.

¿Cuantas veces, en  esta semana has visto el cielo, has admirado la belleza de un árbol o de una flor?

¿Cuantas veces, has sentido tu existencia, ese fluir constante de la vida?

Pero si te pregunto ¿cuantas veces te has visto en el espejo, esperando estar presentable para tal o cual circunstancia?.

Te ves para estar presentable para “el día que se avecina”, el día no se avecina , el día está sucediendo ahora.

 Puede ser que ni siquiera al mirarte al espejo te has detenido a agradecer que estas vivo o viva.

Si en este momento haces el intento de estar solo en el presente, veras como cuesta hacerlo, cuando menos te des cuenta ya estas en el futuro, los pensamientos te ganan.

Pero no importa,  basta con que tomemos consciencia, y comenzaremos el camino.

El Señor Ratán Lal,  uno de los maestros más austeros que conocí en la India, decía que los pensamientos  son como los ladrones, si los descubres salen corriendo.

Eso significa que cuando tenemos lucidez y vemos verdaderamente lo que ocurre con los pensamientos que quieren manejarnos, estos huyen y nos libramos de ellos.

Volvamos al presente una y otra vez. Cada vez estaremos mas cerca de nosotros mismos, y por consiguiente de todo y todos los demás.

Hace un tiempo,  leí un reportaje que le hacían a una congresista peruana muy popular que acababa de superar un cáncer.

En su relato ella decía que cuando de manera sorpresiva le dijeron que ella estaba con cáncer, su pensamiento fue, ¡¿Y el futuro que estaba planeando?¡, toda una vida de planear un futuro,  en donde disfrutaría del fruto de tanto esfuerzo, años no vividos a plenitud porque se reservaban para disfrutarlos a futuro.

¡Y ahora me dicen que no hay un futuro¡

Que ilógico, si  de algo no somos dueños es de nuestro futuro, solo nos pertenece el HOY.

Hoy tus hijos tienen la edad perfecta para regalarles tu presencia, hoy es posible servir a  alguien, hoy estas vivo, si hoy puedes amar, dar, regalar compartir: ¡ hazlo!.

El cuarto principio Huna es MANAWA, y significa AHORA es el momento de PODER: El PRESENTE

Que tengamos paz mas allá de todo entendimiento.

Imitando la oración de San Francisco podríamos decir:

Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como solo Uno. Te entrego toda mi vida para que me hagas un instrumento de tu paz:

allí donde haya odio, que yo ponga el amor,

allí donde haya ofensa, que yo ponga el perdón;

allí donde haya discordia, que yo ponga la unión;

allí donde haya error, que yo ponga la verdad;

allí donde haya duda, que yo ponga la fe;

allí donde haya desesperación, que yo ponga la esperanza;

allí donde haya tinieblas, que yo ponga la luz;

allí donde haya tristeza, que yo ponga alegría. 

 Divino creador

haz que yo busque:

consolar y no ser consolado, 

comprender y no ser comprendido, 

amar y no ser amado.

 Porque:

dando es como se recibe, 

olvidándose de sí es como uno se encuentra, 

perdonando es como se recibe el perdón, 

y muriendo es como se resucita a la Vida.

 ¡Y así se ha hecho!

 Lo siento, por favor  perdóname


 Te amo,
 Gracias


 Ana María

 


Aloha  Ke Akua



“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”