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Archivos Mensuales: agosto 2013
FE Y MAGIA
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Los Hijos y el «Qué Dirán»
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Del juzgar y criticar
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Dar
Dar es un acto personal e intransferible, no te doy: Me doy.
Cuando me la creo, cuando pienso que estoy en una posición superior siendo el dador y cuando creo que estoy en inferioridad por que recibo: estoy equivocada.
El dar siempre es para satisfacer una necesidad personal.
A veces, cuando aún me encontraba en el estado de victimización, he dado para tapar culpas, otras para comprar cariño y aceptación . Como madre, alguna vez he repetido el estribillo falso desde todo concepto: “Y yo que me he sacrificado por ti”. No es cierto, no hay sacrifico por los hijos, ¡les damos para sentirnos bien nosotros!
No hay sacrificio sin victimas y victimarios.
En Ho´oponopono ya no somos victimas, hemos asumido el cien por ciento de responsabilidad de todo lo que sucede en nuestra realidad.
A veces es mas fácil dar que recibir, cuando damos nos sentimos en control, y eso es, por cuestión cultural. Desde muy pequeños hemos escuchado hablar de la caridad. Recuerdo cuando estaba en el colegio, un colegio que adoré y del que guardo buenos recuerdos, monjitas francesas, cálidas, amorosas! Estas monjitas tenían la costumbre de llevar a grupos de niñas del colegio a lo que en esa época se llamaban “barriadas” hoy se llaman “Pueblos Jóvenes”, bueno llevaban a las niñas a “enseñar catecismo” a otras niñas supuestamente menos favorecidas. Entonces las niñas hacían su gran obra de caridad. ¿qué podíamos enseñar? Si nosotras mismas no sabíamos? Pero ya desde esa época nos grababan, que dar era en posición de poder.
Bueno, hoy sé que no es así, que el acto de dar es con humildad porque me estoy sirviendo a mi misma.
San Agustín dice: ” que la culminación de todas nuestras obras, es el amor. Ese es el fin, y para conseguirlo, corremos, hacia él corremos; una vez llegados, en el reposamos.”
Reposamos, es decir tenemos paz, damos para tener paz, es una necesidad imperiosa, toda nuestra búsqueda en la vida es para finalmente tener paz.
¡Cuantos correos me envían ustedes agradeciendo los artículos que comparto!, si yo me la creo y pienso que estoy de maestra, ya perdí.
Puedo compartir contigo este trabajo que estoy haciendo conmigo, con el único propósito de estabilizarme en un estado paz duradero, cada articulo es como un parto, lo gesto dentro de mi, me inquieto, me cuestiono, me contrasto, porque si no soy coherente con lo que escribo, me daño a mi misma.
He aprendido a amarme y aceptarme y eso me da libertad, yo sigo adelante así sea bien o mal recibida, el trabajo es para mi y sólo para mí.
!Pero sucede algo maravilloso!…
Mientras más me acepto y me conozco, más comunicada estoy contigo, existimos juntos, tu alegría es mi alegría, tu avance es el mío y si sufres mi corazón se conmueve, puedo sentirte, es un solo latido y cada vez mas: ¡“el otro” desaparece!.
A veces me sorprendo hablando con gente en la calle que no conozco pero que siento tan cercana como alguien de mi familia. No te voy a negar que muchas veces también, siento rechazo y es esa parte de mi que aun no ha sido aceptada y que re- conozco en alguien mas.
Sin querer he vuelto al tema anterior de la Autoaceptacion y sobre este tema, tengo algo mas para compartir contigo..
Acá, un pequeño compendio que me envió mi Coach Eduardo Waslli y con quien estoy preparando una serie de charlas sobre las Prioridades y el Niño Interior.
Ya les anunciare mas adelante cuando y donde las haremos.
…“La baja autoestima y la alta autoestima son las dos caras de una misma moneda: la de confundir la conducta con la valía del ser humano.
La persona con alta autoestima no es muy diferente que la persona con baja autoestima, lo que los diferencia es que uno utiliza autovaloraciones positivas y el otro negativas en función de sus conductas.
Así cuando una persona se evalúa a sí misma como buena o mala en función de lo que hace está cometiendo el error de la generalización. “Soy el mejor” o “Soy un desastre”. Alfred Korzybsky, desde la Semántica General, ya advertía de este error diciendo que el verbo SER es una generalización y por tanto un error de precisión del lenguaje,
Ya que cuando decimos que somos una cosa, obviamos que nos somos de una cosa sino de múltiples, que podemos cambiar y por tanto el verbo ser nos define estáticamente, y que no podemos definirnos por una conducta o aspecto concreto, dado la multiplicidad de conductas y aspectos que adoptamos.
No podemos valorar una persona en función de la conducta ya que categorizar como buena o mala significa que siempre actúa bien o mal y eso no es cierto, y aunque actuara bien hasta el momento no podríamos predecir si la próxima vez lo haría bien o no.
No somos buenas o malas personas
sino personas que hacen cosas buenas y malas,
no podemos juzgar la esencia de la persona.
Somos seres humanos, y como falibles que somos,
hay veces que actuamos mejor que otras pero eso no significa que seamos peores o mejores personas.
Albert Ellis dice “Ser buen terapeuta no me hace mejor persona”.
La valía del ser humano no puede ser descrita a partir de un conducta.
Hacemos múltiples conductas(roles), como trabajador, padre, hijo, amante, y no podemos juzgarnos en función de una conducta ni que sea muy importante para nosotros.
Tanto la alta autoestima como la baja autoestima es causa de mucha perturbación emocional: ansiedad, depresión, rabia…
…Acéptese como bueno, valioso, o digno de vivir y disfrutar simplemente porque usted es, no mida en absoluto su ego o persona, sino solo sus pensamientos, sentimientos y conductas individuales, centrándose en sus metas propósitos elegidos.
Cuando un ser humano se las arregla de algún modo para aceptarse, respetarse, en la mayoría de los casos su conducta mejora notablemente: su eficacia aumenta considerablemente, disminuye su ansiedad, culpa, depresión, y rabia y se altera emocionalmente menos”…
Bueno comienza la semana y me quedo con esta idea para trabajarla, no soy lo que hago, no soy lo que tengo, no soy lo que doy ni lo que recibo. SOY porque existo, mi valor es la existencia.
Hoy agradeceré cuando se me permita dar, porque estaré recibiendo un poco mas de paz.
Lo siento, por favor perdóname
Te amo
Gracias
Ana María
Depresión: La rabia congelada
Si de algo se ha hablado en los últimos años, es de la depresión, hay diagnósticos médicos, sicológicos, hasta genéticos.
Pero ¿cuantas veces hemos escuchado que la depresión es rabia congelada por la incapacidad de aceptar que las cosas no salen como queremos?.
Este articulo no pretende ser un tratado científico, puesto que no soy sicóloga, no soy científica, pero si puedo decir que hoy día,. ¡yo no tengo depresión!, que la tuve y que quedo atrás, cuando acepte que las cosas no tienen porqué salir como yo deseo y que lo mejor que todo, es que no hay errores, ¡que la Divinidad siempre me dará lo que es mejor para mí!
Contar detalles esta demás, si hoy tu crees que tienes depresión ya sabes lo que se siente, para que te digo más.
¡Es la pura expresión del egoísmo!
Egoísmo, es una palabra muy usada, en el diccionario la definen como: “amor excesivo e inmoderado que una persona siente por si misma y que le hace atender exclusivamente su propio interés”
Yo me pregunto ¿alguna vez el amor puede ser excesivo?, o será que a ¿aquello que llamamos amor es otra cosa, como apego, miedo, inseguridad, afán de controlar?
En Ho´oponopono no tengo que explicarme nada, no busco las causas, todo lo que me molesta, simplemente lo entrego para ser transmutado, pero hay veces que esa decisión, esa voluntad de entregar no se activa hasta que no me doy cuenta cuales son los mecanismos o memorias que he estado activando, por eso comparto contigo estas reflexiones.
La depresión es egoísmo y el egoísmo lejos de ser amor desmedido por uno mismo es desamor desmedido. Es vacío que quiere ser llenado con ser el centro de atención y de pedir, pedir y pedir que todo venga de afuera. Es centrarse en “Lo que no tengo y no me dan”.
¡El estado de victima en su mejor expresión!
Pero, ¡que le vamos a hacer!, ¡de allí venimos!; Todos hemos experimentado ese grado de exigencia en la primera infancia y en ese momento era valido, pero ¿ahora…como adultos…?
Recuerdo nuevamente el principio “A lo que me resisto, persiste, lo que acepto se transmuta”. Si reconozco que estoy o he estado en esa situación, la acepto, es una memoria mía y no la rechazo, pero si hago el proceso de la entrega.
En los últimos talleres de Sanación del Niño interior, ha habido experiencias extraordinarias en el proceso de entrega, de memorias tan arraigadas que hubieran parecido imposibles de transmutar. Si no te es posible participar de los talleres, puedo orientarte a seguir el proceso, estos artículos te dan las primeras pautas.
Cuando finalmente entiendo que todo lo que esta en mi realidad no es sino la repetición de lo que ya conocía, para hablar en términos cibernéticos, son programas de mi disco duro que activo, y que van formando lo que vivo día a día.
Alguna vez pregunte a mi maestra, sobre qué pasaba con la muerte, si todo es recreado por mi misma, ella me contesto “Morimos porque como humanidad, re-conocemos que existe la muerte”, igual pasa con los desastres naturales, tenemos memorias ancestrales, que han nacido con nosotros.
En este momento me pongo a pensar, en la historia bíblica de Adán y Eva, cuando Dios los crea les dice que vivirán para siempre y cuando ellos eligen desobedecer, graban ya las primeras memorias de temor, culpa y luego vendrá la memoria de egoísmo y muerte con Caín y Abel. ¡Que increíble! Ver todos estos conceptos desde el ho´oponopono, a mí, me hace comprender cada vez mas.
Vuelvo entonces al tema de la depresión, ya entendí. Me deprimo por que no obtengo lo que quiero, entonces no es depresión, es pataleta infantil!!.
¡Que simple! Suelto el deseo, me entrego… y llega la paz.
Alguna vez te conté y te la cuento ahora nuevamente, la historia de cómo atrapan a los monos en la India; El cazador pone en el fondo de una vasija de barro de cuello angosto y muy pesada, un trozo de sal, el mono viene, mete la mano y empuña la sal, cuando quiere sacar la mano con el puño cerrado ya la mano no pasa por la boca angosta y el mono no puede correr porque la vasija pesa, entonces viene el cazador y lo atrapa sin dificultad ya que el mono es incapaz de soltar la sal y así obtener su libertad.
Te parece conocida esa situación?, cuantos trozos de sal tengo empuñados?
Que ilógico ¿no? Perder la tranquilidad por un trozo de sal!!!!
¡Todo es cuestión de prioridades!
Te dejo con esta reflexión, hoy acepto que las cosas no tienen que salir como yo deseo, que la Divinidad siempre me dará lo que es mejor para mi, aunque en el momento yo no lo vea así y que ningún apego vale la pena de ser cambiado por la paz de vivir en estado de entrega constante.
“La paz comienza conmigo” y cuando la paz se instala en mi vida, todo lo demás llega por añadidura.
Lo siento, por favor perdóname
Te amo
Gracias
Ana María
¿Existen Niveles Espirituales?
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GRATITUD
“ La gratitud es el espacio sagrado en donde aceptas que existe una fuerza aún mayor que tu ego, y ella está siempre trabajando y es siempre disponible”
Wayne Dyer
Agradecer, Agradecer, Agradecer, cada respiración es un motivo de gratitud, ¡existo, estoy acá! y las posibilidades son infinitas. ¿Para qué pensar en lo negativo? Cuando hay tanto bueno y hermoso, para agradecer y por venir?.
El tercer principio Huna, es Makia y dice: “Allí donde va mi atención va mi energía” , este principio es tan lógico y comprobable que basta con ver como crece una plantita a la que prodigo cuidados o como se embellece la mascota que lleno de amor, mientras en algún lugar de la casa o la oficina algún objeto olvidado se cubre de polvo y se deteriora hasta desaparecer.
Pienso:¿que puedo decir entonces sobre la atención y amor que me doy a mi misma- a mi niña interior? Si yo soy quien crea mi realidad!
Si me enfoco en lo bueno, lo bueno crece, cuando mi salud se deteriora me enfoco en mi fuerza, creo en mi, creo en la Divinidad mostrándome algo que debo limpiar y que se me estaba escapando, y agradezco.
Yo se que hay momentos de perdida, perdida de seres queridos, de amores, de proyectos.
Si, hay momentos de perdida. Y también puedo agradecer. Agradecer por haber tenido el privilegio de vivir a lado de aquellos que se fueron, tuve la oportunidad de amar , la ilusión de esperar lo venidero. Por todo es eso ¡Gracias Dios Mío!
Siempre habrá algo para agradecer.
Y así se desenvuelve mi vida, dependiendo en donde ponga mi atención.! Hay luz o hay sombra!… Yo me pregunto, ¿Si sé, que las cosas son así, para qué pongo mi atención en lo que no me gusta? Eso es comportarme como tonta sin serlo, ¿no?
¿Qué hace que no pueda agradecer? El egoísmo infantil, ese estado del que ya he hablado, ese circulo rojo que nos rodea en la primera infancia, de demandar, depender, exigir, ser intolerantes y temerosos. El negarme a aceptar que! las cosas no siempre tienen que ser como yo quiero!.
Saldré del circulo rojo y comenzare a vivir en la etapa del aceptar, del dar, del agradecer, del bendecir…del amor incondicional en donde, doy por el hecho de dar, sin esperar ninguna retribución porque al dar me siento plena.
Me repito, una y otra vez las enseñanzas, y al repetirlas voy calando en mis barreras mentales , una y otra vez me repito y medito en la enseñanza, hasta que sea parte de mi, porque se que si comienzo a practicar a cabalidad, uno solo de los siete principios, todos los demás lo seguirán y fluirán de manera total en mi vida.
Acompáñame, solo enfócate conmigo en lo bueno, veamos lo bueno, hablemos lo bueno, hagamos lo bueno y agradezcamos sin parar!
Gracias por tu interés, gracias por estar allí, gracias por compartir y gracias por que tu y yo compartimos la misma luz.
Gracias
Ana María
Autoaceptación
Cuantas veces escuche hablar de la autoestima y siempre, esa palabra llevaba consigo la carga de alguna opinión externa a mí, cuando aprendí que el secreto está en la autoaceptacion, aceptarme yo misma, amarme y reconciliarme internamente, entonces supe, que eso era lo que yo quería.
Autoaceptación significa reconocer que soy valiosa y digna de ser querida y respetada a pesar de no ser perfecta. Mi valor es la existencia, esa existencia que es una sola y que compartimos todos.
Tengo casi 60 años, y cuando uno llega a esta edad la vida te regala algo muy bueno: La ventaja de observar como fueron los resultados.
He convivido con tantas personas, y he vivido tantas experiencias, que hoy puedo valorar muchas situaciones en su dimensión correcta. Aquellos que aprendieron a aceptarse, valorarse y contrastarse, invariablemente han llegado a un estado de estabilidad emocional y paz, independientemente del trabajo que realizan, su condición social o económica.
La autoaceptacion es un bálsamo, deja la comparación y la competencia de lado, y sólo es el contraste conmigo misma. Ahora hago eso, me contrasto, como estaba ayer y como estoy hoy, y mantengo muy presente mi tendencia a los defectos de carácter para no repetirlos; borro, limpio, limpio, gracias a Dios tengo esta herramienta maravillosa del Ho´oponopono, nunca sabré cuantas memorias avalan esos defectos de carácter, entonces me mantengo alerta y limpiando.
Estar alerta, es estar despierta, atenta, presente y feliz.
Vivir en el presente es aceptar que hoy estoy en paz, solo por hoy, hoy hago mi mejor esfuerzo, hoy enfrento los retos de hoy, hoy es interminable porque es el único tiempo que existe: HOY.
Aceptarme y aceptar mis errores de cálculo, no quiere decir que me gusten, es que ya no voy en “contra de”, recuerdo el principio básico: “a lo que me resisto, persiste, lo que acepto se transmuta”, mi educación me orientaba a la perfección y mientras mas perfecta quería ser , ¡mas infeliz me sentía!
Lamentablemente esa misma medida la usaba para la exigencia que ponía en quienes me rodeaban.
Me revelaba en contra de lo que me disgustaba de mi, quería ser siempre mas delgada, mas exitosa, mas inteligente, mas bella: Perfecta según la imagen y modelo que, en algún lugar mi memoria tenia grabada.
El sentir que mi felicidad estaba condicionada a llegar a esas metas inalcanzables era agotador.
Y de pronto descubro que la verdad es que soy imperfecta, que valgo porque existo, que toda mejoría es ganancia, y que cada caída es experiencia y que me puedo levantar cuando me caigo y ¡me levanto con mas sabiduría!
Autoaceptación es sabiduría y la sabiduría lejos de venir con el aprendizaje intelectual, llega con el conocimiento de uno mismo, y cuando finalmente llegamos a conocernos, nos integramos a la creación, ¡ya nada nos es ajeno!.
Que la Divinidad nos llene de luz, de tolerancia, de flexibilidad y de alegría de vivir
Lo siento, por favor perdóname
Te amo
Gracias
Ana María
Adjunto Power Point1-1.1_Hay_emociones_que_pueden_matarte