“Por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nubes”.
Khalil Gibran
Para los chinos, el arco iris es una abertura al cielo sellado por la diosa Nüwa, con piedras de cinco colores diferentes, para los aborígenes australianos, la serpiente arco iris, es el Creador, una leyenda irlandesa dice, que al final del arcoíris nos espera una inmensa olla de repleta de oro, y por supuesto para los cristianos, el arco iris es una promesa de Dios y el símbolo que la tormenta pasó y finalmente salió el sol.
Para mi el arco iris representa la esperanza, sostenida por la fe.
Es mejor, confiar, dejar, y aceptar, si estas en medio de una crisis, confía, no te resistas y déjate en las manos de Dios aceptando que se haga Su voluntad y no la tuya.
Yo se que es difícil soltar el control, cuando lo que queremos controlar se refiere a nuestros hijos o a situaciones que consideramos vitales.
Soltar el control no es abandonar, es dejarle el volante a un conductor experto.
Nuestro consciente- Madre-Uhane tiene la facultad del libre albedrio, y eso puede ser nuestro carcelero o nuestros liberador.
Tu y yo tenemos el poder de hacer aparecer el arcoíris en nuestra vida.
Si en medio de un momento de prueba, DECIDO: resistirme, quejarme, lamentarme y sufrir: es mi facultad.
Pero también puedo, ACEPTAR Y ENTREGAR, entonces si lo hago, veré salir el arcoíris de la esperanza, mi vida estará en manos de la Divinidad que sólo me dará lo que es mejor para mi.
Para llegar a esto es necesario ejercer nuestro libre albedrio, todo lo que experimentamos en nuestra realidad, es debido a esta facultad de la cual hemos sido dotados y que no ejercemos con responsabilidad.
He dejado de culpar, a la vida, a Dios o a la suerte, y he pasado a reconocer que soy responsable de todo lo que experimento en mi vida.
Cada día, cada hora, cada minuto y cada segundo es un comienzo, ¡Oh Maravilla¡ la libertad está, en tan solo decidir ser libre.
La vida esta llena de color, de paisajes maravillosos, y es nuestra faculta elegir como puede ser percibido en nuestro interior.
Casualmente, ayer regresaba a mi casa, y el paisaje par mí, era conmovedor. El mar estaba muy calmo, de color verde profundo y salpicado de muchos veleros multicolores, el cielo no era azul pero tenia una gama de colores que iban del blanco , al gris y al magenta, y no pude menos que agradecer infinitamente.
Agradecer en primer lugar por existir, por la vista y el regalo de ver, y por mucha otras cosas que sentí en ese momento.
Fueron un par de minutos, pero de eso, está hecha la felicidad de minutos en conexión con la gratitud y el amor.
El quinto principio Huna se llama Aloha, que significa Amor, y para los hawaianos, “Amor es estar feliz”, ese estado contiene el perdón y la gratitud.
Cuando estoy feliz, no juzgo, no critico, no me quejo y no me lastimo, ni lastimo a nadie más.
Hoy te hablare de algo nuevo, y que esta muy relacionado con esto que acabo de relatarte y se llama IKE o PERCEPCION.
En la enseñanza Huna, se distinguen cuatro tipos de percepción:
Ike Pappakahi: es el nivel objetivo, es cuando simplemente veo y describo internamente para mi, lo que veo.
El paisaje que vi ayer, primero fue una simple descripción interna, el mar , el cielo, los veleros.
Ike Papalua: Es el nivel subjetivo, cuando interfiriere la emoción.
Al ver el paisaje: me conmoví.
Ike Papakolu ; Es el nivel simbólico, en donde lo que veo tiene un significado interno para mi.
El paisaje que tuve ante mis ojos, para mi representaba la bendición que Dios ha puesto en mi vida, me regala la vista maravillosa del mar cada día y eso despierta mi gratitud y representa una promesa constante.
Ike Papaha: es el nivel holístico cuando experimentamos la unidad
El mar, el cielo, los veleros y yo fuimos uno, tan solo por unos segundos, pero fue suficiente.
Estos cuatro aspectos de percepción, me dan una herramienta más para el trabajo personal, identificar mis emociones y profundizarlas positivamente.
Como verás todo sucede dentro, no fuera., los cuatro niveles de percepción son únicos en cada persona y siempre están sucediendo dentro de nosotros.
Yo pude ver el paisaje y expirementar algo completamente distinto, dependiendo que sucedía con mi percepción.
Pude decir, el cielo no esta azul, hace frio y finalmente sentir envidia por aquellos que pueden costearse un velero y entonces hubiera llegado a mi casa llena de amargura.
¿Te das cuenta como todo sucede dentro?
Al final del arcoíris, tu y yo encontraremos, lo mismo que hay en nuestro corazón, porque toda nuestra realidad no es más que reacción, reflejo y resonancia de nuestro interior.
Hoy deseo para nosotros que tengamos paz mas allá de todo entendimiento.
Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como solo Uno. Dejo en Tus manos mi vida entera, confio en tu inmenso poder y acepto Tu voluntad.
Sea lo que sea que Tú pongas en mi camino, lo aceptare en la confianza de que es lo mejor para mi.
¡Y así se ha hecho!
Lo siento, por favor perdóname
Te amo, Gracias
Ana María
Gracias, gracias, gracias. Busqué y encontré…