Soberbia

Comienzo este artículo pidiéndote perdón, te pido perdón por aquello que pueda haberte causado dolor o conflicto, puedo haberte afectado con afirmaciones que pueden ser ciertas para mí, más no para ti.

Si de alguna manera te he afectado, te pido perdón.

Hacen unos días recibí un correo de una persona que se sentía sorprendida, por mis comentarios sobre la depresión, al leerlo. me di cuenta que sigo repitiendo una memoria,  que he recreado muchas veces en mi vida,  y es la de suponer que las personas piensan igual que yo.

Eso es un error, ¿quién puede ser dueño  de la verdad?,  lo que si,  es  verdad,  es que aun  me equivoco mucho, muchísimo, que mi camino está  recién comenzando y me falta mucho por limpiar, pero no me detendré.

¿Cual es la definición de soberbia?

Viene del latín: Superbia. Que es un sentimiento de valoración de uno mismo por encima de los demás.

Lo mas increíble es ese sentimiento de valoración puede ser también relacionado a lo negativo.

Así encontramos la soberbia de la pobreza, y  la  del abandono.

Alguna vez me he encontrado a quienes se sientes orgullosos de ser renegados de la sociedad, o los que se dicen a si mismos malos y merecedores de castigo, hay mucha soberbia escondida en estas afirmaciones

Pero también esta la soberbia del conocimiento, la soberbia de la cultura y  del poder, de la belleza, de la juventud, de la riqueza, etc.

Pero hay una,  que se cuela entre rendijas y que es de temer,  y es la soberbia del avance espiritual.

La verdad es que somos simples seres humanos, que nuestro único valor es la existencia, y nuestra existencia es de una fragilidad tal,  que cada respiro es un don,  legado por lo Divino.

Increíblemente, detrás de la soberbia se alberga el miedo y la inseguridad.

Hay términos que pueden confundirse, como el orgullo, que muchas veces es usado como satisfacción por algo… estar orgulloso de tu familia,, de tu país, de tu trabajo. ..

Creo que para no caer en la soberbia, seria mejor estar agradecido por tu familia, tu país,  tu trabajo, etc.

La soberbia es uno de los peores enemigos de la vida espiritual, si la albergamos, tarde o temprano desviaremos nuestro camino,  para ir detrás de una causa errónea.

Cuando en Ho´oponopono utilizamos las cuatro palabras sanadoras: lo siento, Perdóname, te amo, Gracias,

Estamos limpiando nuestra memorias de soberbia, y enseñando a nuestro Unihipili a mantener esa limpieza.

Lo siento por que estoy utilizando una memoria de dolor.

Perdóname por el sufrimiento que me  he causado y te he causado.

Te amo, por lo mismo te acepto como un ser humano cuyo valor es existir.

Gracias,  por la oportunidad de haber amado y perdonado.

 

Al repetir estas cuatro frases, el  proceso de re-educación de nuestro subconsciente-Unihipili- Niño interior, ha comenzado.

Las memorias que vamos activando cada día, al trabajar en nuestro avance espiritual, le enseña al niño,  que nuestro propósito es borrar, limpiar las memorias de conductas negativas y de dolor.

La decisión de limpiar la tomamos desde nuestro consciente- Madre-Unhane, es allí en donde tomamos las decisiones, es ejercer nuestro libre albedrio.

La madre decide y el niño siempre esta dispuesto y ansioso por obedecer a la Madre.

Darse cuenta de esto nos mantiene alertas al lenguaje que utilizamos porque es con las palabras que usamos, como activamos las memorias que guarda el Niño.

No me cansare de repetir una y otra vez que lo que vivimos en nuestra realidad está condicionado por nuestras memorias.

Dios es un dador eterno, reparte Su Gracia siempre, lo que hace que nosotros no podamos disfrutarla,  es que,  en lugar de ver directamente a la luz de la gracia, vemos a través del manto de nuestras memorias.

A veces ese manto es grueso, muy grueso, está oscurecido y pesado y por eso es necesario continuar con la limpieza y el borrado de memorias para que la luz se muestre cada día más y más.

Me mantendré alerta para no repetir memorias de soberbia, y si aparecen las aceptaré como mías, para poder entregarlas a lo Divino, y que sean transmutadas en Luz.

Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como solo Uno no quiero nada de lo que pueda encontrarse en el mundo. Concédeme aquello que sólo Tú tienes: Paz y serenidad, No quiero nada más que estas dos cosas.

Teniendo paz y serenidad, brillará Tu luz en mi vida y  la soberbia habrá salido de mi realidad.

¡Y así se ha hecho!


Lo siento, por favor  perdóname


Te amo,
Gracias


Ana María

 


Aloha  Ke Akua



“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”
 


 

 

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